
Subiendo en una de las veredas del itamo nos llevan a la parte alta a uno de los tantos puntos donde podremos admirar la belleza paisajística donde se puede observar los valles de Acultzingo, Maltrata, Mendoza y parte de Rio Blanco.
Es una de las costumbres con mayor atractivo ya que se pueden admirar en las calles, infinidad de luces ocasionadas por velas y pabilos encendidos, representando así la senda luminosa que orienta al Niño Jesús. El 7 de diciembre a las 7 de la noche...
¡Sabias Que! Además de río y playa, existe un paraíso al interior del mar, los bajos donde podrás nadar y snorkelear.